El 12 de octubre de 2025, durante una reunión de oración en línea, el Hombre de Dios Hyeok proclamó lo siguiente sobre un hombre que el Señor le reveló:

“Veo a un hombre. Tienes una enfermedad en tu parte íntima. Pero sientes vergüenza, así que no vas al hospital, no se lo dices a nadie. Esa enfermedad vino a ti por algo que hiciste en lo privado. Estoy viendo cosas extrañas que estás haciendo. Y por causa de ese pecado, esa enfermedad comenzó en tu parte íntima. El Señor te está sanando ahora mismo. Después de recibir la sanidad, nunca debes volver al pecado. Debes vivir una vida diferente.”

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Este hombre contactó a nuestro equipo para testificar cómo Dios lo perdonó y lo sanó grandemente con Su amor.

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Él compartió la siguiente confesión:

“Hasta mediados de mis veintes, viví en pecado sexual—masturbación, citas mundanas e inmoralidad—y terminé contrayendo enfermedades de transmisión sexual (clamidia y ureaplasma).

Por eso sufrí un dolor extremo, incluyendo cistitis, uretritis y dolor al orinar. El dolor era tan severo que no podía dormir más de dos o tres horas por noche.

Después de recibir oración del Hombre de Dios Hyeok, todo el dolor desapareció a la mañana siguiente. El Señor me sanó.

Más que nada, lo que quedó en mi corazón fue la advertencia del Hombre de Dios Hyeok: ‘Nunca debes volver al pecado. Debes vivir una vida diferente.’

Ahora, para no volver al pecado, me estoy llenando de la Palabra de Dios.

La razón por la que puedo testificar sobre algo tan vergonzoso es porque todo es la gracia del Señor.”

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A través de lo que Dios ha hecho por este hombre, oramos para que los corazones sean restaurados, se aparten del pecado y se levanten con fuerza para vencer.

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Te animamos a ver el video completo del testimonio y recibir gracia.